Creo en el poder de las letras y
en el poder de los números, pues como ingeniero y escritor de closet, los uso a
menudo, todos los días. Veo el resultado de su magia y su fuerza.
24 años… 2+4=6
En numerología, el número seis
representa la fuerza divina. La héxada, expresada en la armonía y belleza de la
Naturaleza, representa la creación del mundo, la perfección de las partes.
Particularmente sagrado en los círculos órficos, simbolizaba entre ellos el
matrimonio y se representó mediante dos triángulos, que hacían alusión a lo
femenino y a lo masculino. Desde entonces se le considera el símbolo del Amor.
Uno de sus signos místicos es la estrella de seis puntas o "Sello de
Salomón", también llamada "Estrella de David". El seis es un
número equilibrado que puede dividirse en partes iguales y a la vez en tres
partes (1+2+3=6), indicativo de equilibrio y salud.
Contiene dos veces al tres: la verdad y su
reflejo.
La sexta carta del Tarot es "Los
Amantes", que simboliza amor y abundancia.
Los amantes representan el amor incondicional.
Para las personas con seis en sus vidas, lograr la armonía es fundamental;
consiste en unificar la conciencia (Adán) con la subconciencia (Eva) y la
Superconciencia (el Arcángel), teniendo a veces dificultades para saber cómo
enfrentar opuestos.
Se les hará imprescindible cultivar el
discernimiento y resolver dudas a través de un actitud íntegra. En el sentido
más elevado, la visión de la orientación correcta llegará conforme se vayan
desarrollando los sentidos psíquicos.
El sexto cuerpo espiritual representa a la cuerda
del arco, y su frase clave es "Una persona en oración" (amor,
romanticismo, belleza, sociabilidad, sensualidad, abundancia económica). Se
relaciona con la justicia. Cuando este cuerpo está armonizado, la persona es
amorosa, de naturaleza muy cálida, responsable, compasiva, ecuánime, dulce,
justa y talentosa, mientras que los aspectos negativos son ser elitista,
despilfarradora y negligente de su persona.
Creo en el poder de los números,
lo repito. Me siento feliz, entusiasmado, presiento que éste será un buen
cumpleaños, y si no es así, yo mismo me encargaré de que lo sea; pues aunque el
festejo no será nada exuberante, siento mucha alegría éste día. Creo que nunca
me había sentido tan así en un cumpleaños, pero qué maravilloso es. ¡Y qué
hermoso! Qué magnifico es celebrar otro año más de vida, otro comienzo, nuevas
personas, nuevas risas, llantos, experiencias… Todo.
Estoy agradecido con el universo
por la vida que me ha dado, y no podría ser más feliz; pues a pesar de mis
demonios y momentos oscuros, sé apreciar la chispa de la vida y la belleza donde
quiera que me encuentre, mi sentido del humor me ayuda. ¡Qué magnifico regalo se me ha dado! Otro año más de
vida, otro año más, en este hermoso mundo. ¡Y voy a difrutarlo!
Gracias.