Bueno… otro año que se termina; y con él también terminan algunas actitudes y aptitudes mías.
Ya basta de confiar tanto en la gente, de ser tan desinteresado, de ser tan PENDEJO en pocas palabras.
Es tiempo de enfocar mi mente en cosas más importantes que divagar sobre los posibles finales de los cuentos de hadas. Tiempo de tratar de resolver los problemas tangibles y no los imaginarios. Tiempo de perdonar, pero también de ser más culero… porque sólo así lo respetan a uno.
El 2010 no fue un muy buen año para mí, quizás lo mejor que pudo haberme pasado fue que por fin logre entrar al gimnasio de la escuela, cosa que quise hacer desde primero jaja, que conocí muchas buenas personas, pase muchos buenos ratos y trate de llevármela en paz. Pero esa constante, esa terrible constante en mi vida que hace que las personas en quiénes mas confío terminen volviéndose traicioneras serpientes con ponzoñosos colmillos. Si, aprendí que por mas simpática que pueda parecer, por mas amable, por más romántica, por más maravillosa… la gente no deja de ser gente, y ése simple hecho ya es motivo de desconfianza. Pero uno no aprende hasta que experimenta el chingadazo en carne propia.
Aprendí una frase a finales de éste año:
“¡A chingar a su madre!”
Si, mandar a la chingada me parecía una solución un tanto ruda, algo así como tener una uña enterrada y cortarse el dedo con un machete, así sin dedo no hay uña que se entierre.
Así es, no dar la oportunidad a que reincida el dolor significa erradicar lo que lo causa desde la raíz, sin importar si se podía curar o no.
A veces el egoísmo es una buena forma de sobrevivir. Qué triste.
Pero bueno, fueron más las cosas ogetes que me trajo el 2010 que las cosas bonitas, así que con gusto grito a los cuatro vientos:
“¡Vete mucho a la chingada, pinche año culero!”
Y humildemente recibo al 2011, que espero sea mucho mejor que su antecesor.
Sólo me resta desearles una feliz celebración de año nuevo a todos y que el siguiente se la pasen muy chido! Gracias a todos por su maravillosa amistad, por las lecciones de vida, los consejos y las risas. Gracias por todo y que venga más!
Hace 11 años.